Disfruta de la vida, respira profundamente, descansa lo suficiente, se consciente de que estas vivo.

Esta es una condición que se presenta cuando la mente empieza a divagar y entra en estado de ahorro de energía, que suele ser activado cuando se encuentra en una situación repetitiva que puede ser manejada como la experiencia pasada.

Por eso, ante esto lo mejor es practicar técnicas de meditación como el mindfulness que nos permitan centrar nuestra atención en objetivos específicos.

Todo está en la mente, así que céntrate en cambiar tus hábitos y anexa acciones distintas a tu día, respira profundamente y ponle actitud a tu vida.

Estos son algunos de nuestros consejos prácticos para que empieces a disfrutar más la esencia de la vida:

1.Deja el celular a un lado, y enfócate en las personas que tienes a tu lado.

2. Cambia tus planes habituales y añade diversión.

3.Cuando salgas a caminar explora nuevos caminos.

4. Sal de tu zona de confort y arriésgate a vivir nuevas sensaciones.